En el mundo del marketing experiencial, medir el éxito de un evento va mucho más allá de los números en una hoja de cálculo. Durante años, el ROI (Return on Investment) se interpretó únicamente como la relación entre lo invertido y las ventas generadas. Pero en una era donde la atención, la emoción y la conexión humana son los nuevos indicadores de valor, esa métrica ya no cuenta toda la historia. Gente tomandose una foto en un evento de disfraces El ROI no solo se mide en di

En la industria de los eventos, una pregunta clave define el éxito: ¿qué esperan los asistentes de las experiencias que diseñamos? La...

El Experiential Marketing Summit 2025 (EMS)  reunió en Las Vegas a más de 1,500 profesionales y líderes de marketing B2B y B2C para...

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